Hay quienes piensan que al celebrar Halloween, fiesta de origen celta y no americana como se piensa popularmente, estamos acabando con nuestras costumbres y tradiciones propias.
Mi opinión es que hay tradiciones que con el paso del tiempo y los cambios de roles de la sociedad simplemente desaparecen por sí solas, del mismo modo que hace 500 años no contábamos con los mismos recursos que ahora, ni pensábamos del mismo modo.
No creo que no celebremos Los Finaos por celebrar Halloween, sino porque simplemente ya las costumbres familiares de reunirse y que la matriarca cuente historias de los fallecidos no es lo que más se estila. No recuerdo de pequeña celebrar Halloween y en su lugar tampoco celebré nunca Los Finaos.
Los niños son niños, jugar es la base de su aprendizaje y cualquier ocasión es buena para pasar un buen rato. Por eso, por tercer año consecutivo, mis peques han creado con toda la ilusión del mundo durante toda la semana los adornos para decorar la ludoteca y que quede totalmente terrorífica.
Cojan sus libros de pociones mágicas pues, y a crear.
¿Ustedes que piensan? ¿Creen que celebrar Halloween está reñido a no celebrar Los Finaos? Yo por mi parte acojo esta fiesta en mis dinámicas, como todos los recursos que me permitan potenciar la imaginación y creatividad de mis pequeños artistas y ellos se apuntan a todo lo que incluya disfraz, juegos y música.
La clave está en la comunicación,en explicarles de donde procede esta fiesta y cual es el verdadero sentido de este día en nuestra cultura, que no está reñido comer castañas con disfrazarse y que los niños conozcan ambas tradiciones. Para aprender no hay límites.
¡Saquen sus escobas y dejen volar la imaginación!
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