Ya esta aquí. Aunque aún nos queda para poder disfrutar de las vacaciones, el ambiente de verano se respira,protector solar, cloro, y mi rica brisa salada. En mi caso, mejor humor sobre todo, que con los días fríos y tristes en los que sólo dan ganas de quedarse en casa viendo la tele tapados con una manta me deprimo mucho, si no se trata de momentos puntuales.
Nada como sentir el calorcito de la arena al acostarse en la playa escuchando el sonido de las olas, o ahora, con Aylan más independiente, al sentarme y enterrar los pies en la arena mientras lo observo atenta jugar haciendo castillos. ¡Yo con eso soy feliz! ¡Y el pequeño también!
Le encanta el agua, jugar en la arena o pasear. Él es feliz descalzo y en la playa.
Se bañó por primera vez en el mar, en Tufia con tres meses, y hace unas semanas, con quince meses, tuvo su primera experiencia sobre una tabla de surf, le hicimos un pequeño bautismo de mar que seguro repetirá porque no quería bajarse de la tabla.
Pero como todo no puede ser bañador y ñoños al aire, aunque nos encantaría, y también hay momentos en los que toca vestirse, pues mucho mejor si seguimos estando fresquitos y aprovechamos que el tiempo está para eso para ponernos ranitas y zapatos abiertos, como los de este outfit.
Ranita: Miss Little Ones
Zapatos: Zara
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